Malos hábitos de higiene abren camino a los virus y bacterias
Ambos tipos de gérmenes pueden ocasionar enfermedades peligrosas. En algunos casos, para detectarlos se requieren cultivos especiales que se realizan en laboratorios de instituciones privadas como el Grupo Médico Santa Paula
Aunque tienen diferencias biológicas, los virus y bacterias causan enfermedades infecciosas que pueden evitarse con las mismas medidas preventivas: cuidar la higiene personal, el lavado y la adecuada cocción de los alimentos y, con el uso de anticonceptivos de barrera, en el caso de las afecciones víricas y bacterianas por contacto sexual.
La médico internista e infectóloga Yoxsivell Limas Pérez, del Grupo Médico Santa Paula (GMSP), explica que las personas que poco practican medidas higiénicas en su día a día están más propensas a infectarse, por virus o bacterias. Tomando en cuenta la clasificación
de riesgo por grupo poblacional, la especialista indica que quienes son más vulnerables a enfermarse por estos microorganismos son los niños de corta edad y los ancianos, por el estado de su sistema inmunológico.
“Es menos vulnerable a enfermarse una persona que tiene una educación sanitaria adecuada, es decir, por ejemplo, acostumbrada a lavarse las manos luego de ir al baño y hacerlo también antes de cocinar los alimentos. Mantener una apropiada higiene corporal, tener los objetos personales de uso exclusivo, cuidar la limpieza del hogar y el aseo de superficies, conservar y cocinar bien los alimentos son acciones que evitan la propagación de virus y bacterias”, señala Limas.
La infectóloga hace énfasis en la correcta manipulación y cocción de los productos derivados de animales, para evitar infecciones víricas o bacterianas. ¿Dónde están estos microorganismos? “Los virus y las bacterias están en cualquier lugar”, explica Limas, por lo que recalca el
cuidado de la higiene personal.
Hay virus y bacterias que se encuentran en el área pulmonar, se propagan por las vías respiratorias (como el coronavirus). Otros se transmiten al tocar superficies contaminadas. También existen los de contacto sexual (que ocasionan el VIH y la clamidia, por ejemplo) y aquellos microrganismos de origen bacteriano o viral, que se pueden contraer tras recibir infusiones de sangre infectada.
La especialista hace mención también a las “bacterias sanas”, que son las que se encuentran en nuestro cuerpo sin causar ninguna enfermedad.
¿Qué daños hacen a la salud?
Limas explica que los virus generalmente producen infecciones, mientras que las bacterias no siempre ocasionan daños a la salud. Algunas viven en el cuerpo y son necesarias para el funcionamiento del organismo. Sobre su “peligrosidad”, la especialista advierte que ambos pueden ocasionar enfermedades graves y muy graves.
“Uno no es ‘peor’ que otro, una infección bacteriana severa puede ser tan mortal como un virus severo, depende de la patogenicidad de cada uno. El virus del herpes labial no ocasiona daños graves, por ejemplo, pero tenemos ahora el cononavirus, que puede causar el fallecimiento de un gran número de pacientes”, afirma.