Los antiguos egipcios utilizaban la manzanilla para la ansiedad, y ahora se está estudiando de nuevo como opción de tratamiento. Y es que la manzanilla es conocida por sus numerosas propiedades curativas, incluidas las antioxidantes y antiinflamatorias.
La manzanilla (Matricaria chamomilla) es una flor seca que se puede encontrar en forma de té en la mayoría de las tiendas de alimentos. La manzanilla se ha utilizado durante siglos como remedio natural para una buena digestión, para la ansiedad y el insomnio. Numerosos estudios han demostrado que es eficaz para reducir los síntomas de la ansiedad, incluidos los ataques de pánico, la ansiedad social y el trastorno de ansiedad general.
La manzanilla actúa uniéndose a los receptores GABA del cerebro, lo que ayuda a regular el sistema nervioso y a calmar la mente. Es rica en antioxidantes y tiene propiedades antiinflamatorias. Por lo tanto, también puede ayudar a reducir los niveles de estrés y promover la salud en general. probar el té de manzanilla.
Este estudio a 179 personas con trastorno de ansiedad generalizada (TAG) constató una reducción significativa de los síntomas después de consumir extracto de manzanilla en comparación con quienes no lo hicieron.