Año Nuevo, vida nueva. Los gimnasios, parques, piscinas y Box de Crossfit se llenan de inscritos que van con la promesa personal de adoptar hábitos saludables. Pero, ¿cuánto dura esta motivación inicial?

El gimnasio se convierte en el protagonista de las resoluciones de Año Nuevo. Miles de personas se inscriben con la ilusión de transformar sus cuerpos y mejorar su salud. Sin embargo, la motivación inicial suele desvanecerse rápidamente.

¿Cuántas veces hemos prometido comenzar a entrenar en enero y a mitad de mes ya hemos abandonado el gimnasio? Las buenas intenciones de Año Nuevo suelen esfumarse y todo queda en promesa, pero ¿qué nos impide convertir el ejercicio en un hábito?

Qué ocurre? Las personas se plantean metas muy ambiciosas, como perder 10 kilos en un mes, y al no ver resultados inmediatos, se desmotivan”. Por ello, es fundamental establecer objetivos realistas y comprender que el cambio de hábitos es un proceso gradual”.

La falta de conocimiento también juega un papel importante”, muchos se guían por videos en redes sociales, sin tener en cuenta que lo que funciona para una persona puede no ser adecuado para otra”.

Alimentación y descanso

“Entreno duro, pero no veo resultados” es una frase común. Esto se debe a que la recomposición corporal requiere más que solo ejercicio. la alimentación debe ser personalizada y calculada según tus objetivos y condiciones de salud. Un profesional puede ayudarte a determinar tus macros y micronutrientes.

El sueño es igual de importante. Palacios recomienda dormir al menos de 7 a 8 horas diarias para adultos y 9 horas para adolescentes. Durante el sueño, se liberan hormonas que reparan los músculos, ayudando a ganar masa muscular.

¿Cómo convertir el ejercicio en un hábito?

· Comienza ya: Olvídate del “el lunes empiezo”. Empieza hoy mismo.

· Encuentra tu actividad ideal: Explora las diversas opciones que ofrece Gold’s Gym, como entrenamiento funcional, clases de spinning, yoga o pilates.

· Establece metas realistas: Divide tus objetivos a largo plazo en metas más pequeñas y alcanzables.

· Sé paciente y constante: El cambio de hábitos requiere tiempo y esfuerzo.

· Celebra tus logros: Reconoce tus avances, por pequeños que sean.

· Disfruta del proceso: El ejercicio debe ser divertido.