En «pobreza extrema» viven los jubilados y pensionados en Venezuela, cuyas pensiones son de hambre. Así lo calificó Emiro Diaz, presidente de la Asociación de docentes jubilados y pensionados del Táchira.
Precisó que los salarios que reciben son violatorios incluso de la propia Constitución en su artículo 91 que establece que el salario debe estar acorde con la canasta básica mensual.
Además indicó que 5 millones 300 mil pensionados del seguro social están en umbral de pobreza extrema, dos años y siete meses de no haber percibido un aumento de su pensión mensual.
Recalcó que según la Organización de las Naciones Unidas (ONU) todo aquel que recibe tres dólares diarios, estaría sumergido en la pobreza extrema y en el caso de Venezuela, un jubilado solo recibe 130 bolívares, es decir, tres dólares al mes.
«Nuestros jubilados quienes dedicaron más de 25 o 30 años de sus vidas a la administración pública, ahora ni tienen una vida digna».
«El 70 % de los pensionados viven de remesas; sin embargo, la inflación se ha consumido lo que envían los familiares debido a que no alcanza», refirió.
«Hoy vemos por las redes sociales a jubilados y pensionados, pidiendo ayuda para poder cubrir sus necesidades de una operación o medicinas, porque todos conocemos la condición precaria de los servicios de salud pública en Venezuela», añadió.
Díaz además comentó que cerca de un millón de pensionados quienes se encuentran fuera de Venezuela no reciben la pensión, ni reciben ningún tipo de bonificación, a pesar de ser un derecho de adquirido por sus años de servicio.