Mantenerse activo físicamente ayuda a reducir el cortisol, la hormona del estrés, permitiendo sentirse más tranquilo y en control
El ejercicio físico es clave para una mente sana. Cuando realizamos actividad física estimulamos a nuestro cerebro a liberar sustancias químicas como endorfinas, serotonina, dopamina, entre otras. Ellas, en conjunto, mejoran nuestro estado de ánimo, aumentan la sensación de bienestar, mejoran nuestro apetito, aumentan la calidad de sueño, y más.
Mantenerse activo físicamente ayuda a reducir el cortisol, la hormona del estrés, permitiendo sentirse más tranquilo y en control.
El ejercicio físico no solo beneficia el cuerpo de forma estética con el desarrollo muscular, sino que también tiene un impacto significativo en la salud mental, ya que contribuye a mantener una mente sana, alejada de preocupaciones y enfocada en el logro de metas que proporcionen bienestar personal.